A veces juzgamos basados en nuestros prejuicios,
les decimos a todos nuestra opinión
y después buscamos cómo justificar nuestras ligerezas,
¿Cuánta energía de vida desperdiciamos justificando actitudes con las que solo pretendemos cubrir nuestros errores,
miedos o inseguridades?
¿Cuánto daño innecesario nos causamos a
nosotros mismos y a quienes amamos?