Tus ojos tristes no reflejan la sorrisa
De tu boca; tu gesto inconformado,
Se parece a una pequeña risa,
Que, cuando necesária, no se encuentra.
Tus cabellos son sueltos como una vela
Embarcadiza, en un velero cualquiera;
Allá va la barca, allá va el mar con ella,
Trae detrás los brazos languidos de una mujer.
Y, tus ojos castaños, perdigueros,
Se parecen a las tablas de este barco,
De tan puros que son., verdaderos.
Tus labios son de satén y carmín,
Que hasta el propio tiempo parece corto,
Para hablar de la belleza. que hay en tí.
Jorge Humberto
De tu boca; tu gesto inconformado,
Se parece a una pequeña risa,
Que, cuando necesária, no se encuentra.
Tus cabellos son sueltos como una vela
Embarcadiza, en un velero cualquiera;
Allá va la barca, allá va el mar con ella,
Trae detrás los brazos languidos de una mujer.
Y, tus ojos castaños, perdigueros,
Se parecen a las tablas de este barco,
De tan puros que son., verdaderos.
Tus labios son de satén y carmín,
Que hasta el propio tiempo parece corto,
Para hablar de la belleza. que hay en tí.
Jorge Humberto