Sabes .
Me estoy acostumbrando
a estar sin ti.

A estar con otros.
A hablar con otros.
A tomar otras manos.
A reír con otros.

Me estoy acostumbrando
a no necesitarte a mi lado.

A no mirar más tu sombra
de mi brazo.

A transitar las calles de
otros brazos.

Me estoy acostumbrando
a mirar el cielo,
la luna y las estrellas,
en otros ojos.
¡ Con otros ojos.!
¡ Nunca más con los tuyos.!

A sorprenderme
con otras canciones.

A sentir y ver
con otros sentidos
que los que tu mataste.

Me estoy acostumbrando.
A borrar miles de días y horas
del pasado.

A dar lugar a otros sueños
sin aquellos que soñamos.

Me estoy acostumbrando
a tu costumbre,
de reemplazarte al instante.

Me estoy acostumbrando
a no necesitarte,
pese haberte creído
irremplazable.

Me estoy acostumbrando.
A dejarte a la orilla
de una mar muy distante.
¡ Olvidada .!
¡ Encerrada .!
¡ Abandonada .!
A la espera de que el mar
te arrastre
y te convierta en polvo.

¡ Me estoy acostumbrando
a no pensar que existes.!

A borrar las imágenes
de momentos felices.

A matar esas luces
de sueños imposibles,
con nubarrones negros,
con nubarrones grises,
que no dejen recuerdos,
de lo que para mi, tu fuiste.

Me estoy acostumbrando
a tu inmenso vacío,
hasta que no me duela
sentir que ya no existes.


¡ Sentir que nunca fuiste.!

Me estoy acostumbrando
a sentir como sientes,
sin reprocharme nada,
a pesar  de que  duela. 

Me estoy acostumbrando
a olvidar los lugares
que un día fueron nuestros.
El bar,
y aquella mesa
que compartimos juntos,
en mañanas de fiesta.
El restaurante y el postre,
el pan negro en la mesa.
La bebida de siempre
y tu risa traviesa.

Me estoy acostumbrando
a que fueron mentiras
las rutas y canciones
que tanto nos unieran.
Tus manos que buscaban,
las mías y quedaban,
atadas en promesas,
en las falsas promesas
de lo que nunca fuera.

Me estoy acostumbrando
a poder entenderte.

Antes no te entendía.
¡ Pero ahora te comprendo.!
Se negaba mi mente
a aceptarte vacía.
Que fueras: "Tu" la imagen
de lo que aborrecía.

¡ Antes no te entendía.!
Pero ahora Sí.
¡ Te entiendo.!
Eres la más infiel
de las que he conocido.
¡ Eres infiel por dentro.!

Antes no te entendía.
Pero ahora Sí.
¡ Te entiendo.!
El mirarme  en tus ojos,
era verme yo mismo,
pero al mirarte ahora:
contemplo el mismo infierno.
¡ Antes no te entendía.!
Pero ya.
ya no me engañas.!

Eres pura apariencia
sin Amor y sin nada.

Fantasía de vientos
que no encuentran destino,
que se van y que vuelven,
sin sentido ni tiempos.

Me estoy acostumbrando
a ver lo que tu eres.
Y esto que tu eres.
Ay .!
Si vieras cuánto.!
¡ Cuánto.!
¡ Lo que eres  me  duele.!

¡ Libertad en el cuerpo
y en el alma cadenas.!