La tarde va muriendo en el horizonte...
Aquí... De rodillas, acompañado de mis amiguitos,
Nuestras manos unidas en oración...
Levanto mis ojos llenos de esperanza
Y casi consigo ver a Papá del Cielo...
Siento que "Él" me está
Escuchando... En este instante...
Dejo mi pajarito verde cantar
Mi canción preferida...
Mi mamá, yo lo sé, se llama María.
Es tan bonita y buena, así como es su Maria
Sé... Ella vendrá corriendo por esa calle,
Me tomará en sus brazos y entre besos y abrazos
Dirá a mis oídos, "hasta que por fin te encontré".
Si yo lo he olvidado, Papá, en ese momento,
Me perdones, no fue desprecio, no...
Es que estaré soñando, tomado de
la mano de esa Santa...
Después de sentir su perfume y ser cubierto de besos,
Pediré un rato para tomar mi juguete,
Algunas ropas, decir adiós a los amiguitos,
Llevando conmigo la dulce y pequeña Ritinha.
Mamá no se enfadará, sé bien...
Las santas nunca se enfadan.
Entonces, ya en nuestra morada, llena de
Amor, emoción y encanto,
Diré muy bajito, cuidando para no
Despertar mi dulce mamá que duerme:
No le dije, Papá del Cielo?
Que mi María era tan
Bonita y buena como la Suya?...